“Yo no me corrí del PRO, el PRO es quien cambió. Siempre fui coherente con lo que pienso y defiendo. Cuando me sumé al PRO, jamás imaginé que la salida a una crisis fuera ajustar jubilaciones, recortar universidades o desatender la discapacidad”, aseguró de modo categórico el diputado nacional y exárbitro internacional, que supo dirigir el Mundial de Sudáfrica 2010, entre otros grandes eventos deportivos.
Si bien hasta diciembre próximo continuará en la Cámara de Diputados dentro de la bancada del PRO, el espacio al que le está agradecido por el trabajo conjunto de estos años, hoy Héctor Baldassi siente que su perfil político tiene otros intereses, más superadores y cercanos a la defensa de aspectos que considera esenciales: la educación, la salud, la discapacidad, los jubilados y la producción.
En esa agenda radican los pilares de Ciudadanos, el partido que formó para renovar su banca en las elecciones de octubre. “Córdoba necesita una representación superadora. Ciudadanos surge después de mucho tiempo recorriendo y conociendo gente con la cual hoy formamos un gran equipo. Es una nueva oportunidad para quienes tienen vocación de servicio y quieren aportar su experiencia para mejorar el debate público, desde el centro y la mesura, sin posturas fanáticas ni extremistas”, le dijo a Nuevo Día.

Estado, mercado y sociedad
Tras la llegada de Javier Milei a la Casa Rosada y el apoyo del PRO a medidas de ajuste impulsadas desde el Gobierno nacional, si bien Baldassi acompañó algunas de las primeras iniciativas, con los meses sus votos comenzaron a marcar diferencias con otros integrantes de su bloque en el tablero de la Cámara de Diputados.
“Valoro la intención de ordenar las cuentas públicas, de terminar con la política en el Estado, pero siempre digo lo mismo: no puede ser a costa de la gente que más necesita”, afirmó al ser consultado por este medio sobre la gestión del presidente.
En esta nueva etapa, Baldassi busca defender en el Congreso la educación pública, la salud, la discapacidad y los jubilados e impulsar proyectos guiados por ejes como el equilibrio fiscal, la producción, la infraestructura, el federalismo y un tema que viene promoviendo desde hace años: el deporte.
“Ciudadanos es un espacio constructivo y propositivo. Creemos en ordenar la economía como lo hace el Gobierno nacional, pero sin descuidar a la gente. Defendemos una política de consensos, cercana, con respeto por quienes piensan distinto. Creemos en la sinergia entre el Estado, el mercado y la sociedad civil”, sostuvo.
En cuanto a este punto, ¿cómo ve la relación entre Estado, mercado y sociedad?
HB: La fortaleza de un Estado eficiente te lleva a mejorar la educación haciéndola de calidad, a mejorar la cobertura en salud; la seguridad, protegiendo a la gente del delito más leve hasta el más grave o la mayor accesibilidad a la justicia. Son cosas que garantizan la igualdad de oportunidades para que la gente viva en paz y pueda desarrollarse de acuerdo a su proyecto de vida.
A su vez, un mercado con reglas claras, estabilidad y apertura inteligente lleva a generar más puestos de trabajo y a abrir paso a la innovación. Esto mejora todos los procesos. Una sociedad civil comprometida a través de sus organizaciones deportivas y culturales fortalece lazos sociales y de solidaridad tan importantes para la armonía social.
En materia legislativa, ¿cuáles serán los objetivos de su espacio?
HB: Cuidar el equilibrio fiscal, pero sin que el ajuste recaiga sobre los que menos tienen. En el Congreso acompañé varias leyes que el Gobierno nacional solicitó para enfrentar la crisis, como la Ley Bases. Quiero seguir por ese camino.
A su vez, el deporte siempre es un tema de interés. Soy un hombre del deporte y en estos años aporté toda mi experiencia en ese ámbito. Hemos logrado mucho: la ley de clubes de barrio, por ejemplo, que permite acompañar a clubes de toda Córdoba. Pero también quiero seguir impulsando proyectos como el mecenazgo deportivo para potenciar el deporte con una baja de los impuestos. Además, proyectos como aumento de penas para quienes roban o vandalizan clubes de barrio y recuperar la autarquía del Ente Nacional de Alto Rendimiento (ENARD), para que apoye de mejor manera a los deportistas de alto rendimiento.
Por otro lado, quiero impulsar leyes que promuevan la producción y el trabajo en Córdoba. Mi objetivo legislativo es claro: más federalismo, más inclusión y proyectos que transformen la vida cotidiana de la gente. En tiempos donde la Nación está descuidando la infraestructura, voy a hacer foco en acompañar la agenda de la Región Centro, fortalecer el federalismo y lo que Córdoba necesita para crear mejores condiciones para producir y sacar sus productos destinados a la exportación.

En su lista, está acompañado por el bellvillense Simón Carcar. En general, ¿cuál es el perfil de quienes integran Ciudadanos?
HB: Somos gente de trabajo, con los pies en la tierra, que conoce las necesidades de los cordobeses. Hay docentes, profesionales, deportistas, vecinos comprometidos. No hay iluminados ni políticos de escritorio, hay ciudadanos que quieren aportar. Creemos en el diálogo como herramienta para que a partir del disenso se pueda lograr el consenso. Creemos que la grieta genera odio y división. El pensar distinto no significa que uno es mejor o peor que el otro. La diversidad de pensamiento es saludable para la democracia.
Deportes y valores
Si algo distinguió la tarea legislativa del diputado cordobés en este tiempo fue su permanente promoción del deporte a través de iniciativas que potencien su vínculo con la ciudadanía, desde un club de barrio hasta un atleta internacional.
“Voy a continuar trabajando para insistir en la importancia de fortalecer los clubes de barrio y de pueblo, porque junto a la familia y a la escuela son pilares fundamentales en la formación de niños y jóvenes –señala Baldassi- Ahí hacen amigos, aprenden a compartir, a cuidar su salud, a llevar una vida ordenada, lejos de las drogas. Después de la familia y de la escuela, los clubes son el tercer eslabón en la formación de valores en los niños”.
En estos años, ¿qué proyectos destacados presentó?
HB: Soy el autor de la Ley de Clubes de Barrio y de Pueblo N° 27.098, que permitió que miles de clubes de todo el país mejoren su infraestructura, generando además empleo. Ya demostró ser una política de Estado que ha trascendido 3 gobiernos de diferentes signos políticos y que lleva miles de millones de pesos invertidos en clubes de diferentes puntos del país.
Además, presenté el proyecto para capacitar a funcionarios de los 3 poderes del Estado en materia de discapacidad y trato no discriminatorio y que las infraestructuras de los edificios y reparticiones estatales se adapten con rampas, braille y demás para ser accesibles a personas con discapacidad.

Asimismo, presenté el proyecto para que todas las instituciones deportivas tengan su protocolo contra violencia de género y otro para mejorar el financiamiento del ENARD a través del 1% del pago mediante la telefonía celular. Otro fue federalizar los centros de alto rendimiento para que los deportistas de las provincias puedan tener a éstos regionalizados y más cercanos a su realidad.
Presenté, a su vez, el proyecto de Ley de Mecenazgo Deportivo, para que los comercios y las empresas que quieran ayudar a deportistas de sus provincias a financiar viajes, indumentaria o materiales deportivos cuenten con exenciones impositivas.
Por otro lado, presenté el proyecto de Ley de Sociedades Anónimas Deportivas, para que todos los clubes del país que elijan voluntariamente este formato puedan tener un financiamiento que los ayude a crecer y contar con gestiones transparentes y mejor controladas. Estoy convencido de que eso va a ayudar a todos los clubes del país a desarrollarse en su financiamiento y en la transparencia de sus gestiones.
También, hice proyectos para agravar las penas a quienes cometan delitos en los clubes de barrio y para la devolución del IVA a los clubes que adquieran materiales deportivos.

A partir de su experiencia en el deporte y en la política, ¿qué similitudes y diferencias encontró entre ambos ámbitos?
HB: El deporte me enseñó a trabajar en equipo, a competir con reglas claras y a respetar al que piensa distinto. La política debería parecérsele más en eso. La diferencia es que en el primero el resultado se define dentro de la cancha de manera inmediata, mientras que en la política muchas veces se pierden energías en peleas que no mejoran la vida de la gente y las decisiones son a más largo plazo. En los 2 ámbitos hay trabajo en equipo, liderazgo y toma de decisiones.
Lo más importante es la necesidad de armar equipos. Tanto en el deporte como en la política, si no se trabaja así no hay manera de que las cosas funcionen. Serán esfuerzos individuales que quedarán a mitad de camino. El equipo es todo.
Octubre y el futuro de “la Coneja”
En un escenario que, según las primeras encuestas, en Córdoba se presenta polarizado, la campaña exige redoblar esfuerzos para que la población tenga en cuenta mucho más que 2 opciones a la hora de votar el 26 de octubre. Gran parte de la tarea de Ciudadanos se orienta a ese propósito.
Córdoba renovará 9 bancas en Diputados y la suya finalizará en diciembre. Si no alcanza ese objetivo, ¿tiene pensado continuar en política?
HB: Siempre voy a estar donde pueda ayudar a Córdoba. Ciudadanos es un proyecto que trasciende lo electoral. No se trata de cargos, sino de defender valores. Además, en todos estos años nunca abandoné mi profesión de árbitro, no dentro de la cancha porque mi cuerpo no me permite dirigir más pero sí asesorando. Nunca deje mi actividad privada.
En esta elección, mi objetivo es animar a todos los que creen que aún es posible hacer política poniendo las necesidades e iniciativas de la gente por encima de los partidos y de sus internas. La gente en las urnas será quien diga si renovaré mi banca. Lo importante es darle a la ciudadanía una alternativa que, entiendo, es sana y aporta algo positivo a la política.

¿Cómo se imagina al país en 2027?
HB: Ojalá que más ordenado, con una economía estable, pero sobre todo siendo un país que no deje de lado a los que más necesitan. Un país donde la universidad pública y la producción estén en el centro, donde los jubilados vivan con dignidad y las oportunidades lleguen al interior profundo. Tal vez pido mucho en tan corto tiempo, pero creo que si dejamos de lado egos y rivalidades inútiles podemos estar más cerca.
Deseo un país con estabilidad económica e institucional, con respeto entre todos y sin descalificaciones entre los que piensan distinto. Un país que invite a los jóvenes a hacer su proyecto de vida en la Argentina. Un país que cuide de sus adultos mayores, las Pymes, el trabajo y la calidad educativa.
Recién le consultábamos sobre el presidente Javier Milei, a nivel provincial, ¿cuál es su balance sobre la gestión del gobernador Martín Llaryora?
HB: Veo a un gobernador con mucha iniciativa, comprometido con la obra pública, creo que eso es bueno. Córdoba necesita de más infraestructura y mantener lo que está hecho. Mi responsabilidad siempre es construir y marcar los límites cuando considero que es necesario.
¿Le gustaría ser gobernador? ¿O presidente?
HB: Mi vocación siempre fue la de representar y defender a los cordobeses. Hoy, mi compromiso está en el Congreso y en construir este espacio que se llama Ciudadanos. El futuro lo dirá la gente. Soy consciente de mis virtudes, pero también de mis carencias. Ya estoy grande para aspirar a presidente. Yo sigo con la misma humildad que tuve desde el primer día: trabajar con honestidad y cercanía.



