Su traje brilla ante la mirada del público. Los patines van y vienen firmes sobre la pista, pero sus sueños siguen bien en alto imitando a sus brazos, que no paran de hacer estilizadas figuras mientras se desliza. Al igual que su mamá, en cada competencia, Sofía Ferreyra Ghione echa a rodar ese talento que trae desde niña y con el cual engrandece el legado del patín artístico del Club Leones.
“Empecé a patinar antes de cumplir los 2 años -creo que tenía 1 año y 5 meses- Es decir, aprendí a caminar y enseguida me subí a los patines, porque mi mamá es profesora y yo quería patinar”, cuenta la hija de Pamela Ghione a días de haber obtenido el segundo lugar en el podio del Campeonato Nacional Absoluto.

La patinadora triguera se sigue preparando para cerrar el año en algunos torneos zonales y provinciales, pero sus metas ya apuntan a 2026. “Para el año que viene tengo un gran desafío: voy a pasar a la categoría A Nacional y uno de los objetivos es poder hacer podio en ella”, asegura la seguidora de Zoe Manggia y Madalena Costa.
En esta nota, Sofía recuerda sus primeros años en este deporte, los mejores logros alcanzados en los distintos campeonatos y adelanta su principal anhelo como deportista: “Mi sueño es hacer podio nacional en la categoría A e ir a un torneo internacional”.

Con los patines bajo el brazo
Algunas niñas suelen imitar a sus mamás subiéndose a los tacos, pero en este caso fueron patines. Antes de cumplir los 2 años, Sofía ya andaba sobre ruedas por la casa, algo que tampoco resultó tan extraño para su mamá, otra reconocida patinadora triguera que acompañó desde un primer momento esta pasión de su hija.
“Mi mamá influyó mucho, ya que fue la que me enseñó a patinar y a amar tanto esta pasión. Siempre que puede me acompaña a todos los torneos, y está en cada paso y decisión que doy”, dice la joven de 14 años que estudia en la ESCBA.

La deportista leonense tiene una larga lista de títulos. Entre otros logros, en 2022 fue subcampeona sudamericana y el año pasado, campeona nacional. En 2025, consiguió el tercer lugar en el nacional y en agosto se consagró subcampeona nacional absoluta, superando así el quinto puesto obtenido en 2024.
“Fue otra hermosa experiencia porque, más allá del resultado, disfruté mucho del torneo. No sentí tantos nervios, confiaba en mí misma y en todo lo que había practicado para llegar a ese día y cómo lo hice. Mi principal objetivo era disfrutar de la coreo, ya que este año no venía alcanzando mi ciento por ciento. Me propuse volver a ser yo y darlo todo en la pista, segura y firme”, comenta.
A Sofía lo que más le gusta del patín artístico son los viajes y las amistades que va cosechando, pero para llegar a esa instancia, cada semana, debe seguir formándose junto a sus entrenadoras, Belén y Yamila Nocelli, el preparador físico Gregorio Sisterna y la profesora de flexibilidad, Laura Dolce.“Los entrenamientos vienen muy bien y gracias a todos los profes puedo mejorar día a día”, describe.

Con brillo triguero
Además del talento que las patinadoras vuelcan en cada torneo, una particularidad de este deporte radica en la vestimenta, un atractivo que suma color y belleza a las pistas pero que también implica un alto presupuesto para las familias de las competidoras.
En los torneos, el vestuario parece tener un rol destacado, ¿es así?
SFG: Sí, es importante ya que resulta obligatorio, siempre y cuando cumpla con el reglamento. La malla de luces es a elección y debe ser acorde a la música elegida para tu solista.
¿Quién elige los diseños?
SFG: Cada patinadora. En mi caso, los diseñamos junto a mi mamá. Ella me ayuda mucho en eso, pero siempre respetando mis gustos. Lo más importante es que yo me sienta cómoda con el diseño elegido.
Por año, ¿cuántos trajes aproximadamente debés usar?
SFG: Tenemos una malla personal (conocida como malla de luces); otra de la asociación a la que pertenecemos, que sirve para recibir la premiación en torneos zonales y provinciales; y otra de la federación, en mi caso cordobesa, que es obligatoria, ya que si lográs quedar en el podio la tenés que usar. Luego, podés contar con mallas de entrenamiento, si querés.

¿Quién cubre los costos de esa vestimenta?
SFG: Cada patinadora debe cubrir sus propios gastos. A veces, se realizan ventas para recaudar fondos, porque es un deporte con precios bastante elevados. Esto también perjudica, ya que en algunos casos nos deja sin poder participar de algún torneo o evento importante debido a los altos costos.
Este año me quedé con ganas de ir al panamericano y a entrenamientos internacionales en Buenos Aires. Si bien había quedado clasificada, se me hizo imposible participar por los costos.

A pesar de esas limitaciones, ¿por qué el patín es tan importante en el Club Leones? ¿A qué le atribuís el nivel de las trigueras?
SFG: Creo que es importante por los logros que obtenemos, que suelen ser muy buenos. Todo eso es gracias al esfuerzo, la dedicación, la constancia, la perseverancia y el amor que le tenemos al deporte.
Fotografías: Pamela Ghione.


